¿Qué podemos hacer cuando nuestros peques nos contestan mal o dicen muchas palabrotas?
Durante la infancia y adolescencia es normal que nuestros hijos puedan pronunciar palabras malsonantes ya que hoy en día están expuestos a multitud de fuentes de información en la que expresan palabrotas o se comunican de una forma inapropiada con sus familiares y/o amigos.
Es importante que ante estas situaciones mantengamos la calma en la medida de lo posible, ya que si reaccionamos de una forma desproporcionada al acto en cuestión estaremos reforzando esa conducta, es decir, le estaremos otorgando más fuerza y poder a esa palabra o conducta. Del mismo modo, conviene no sonreír o reírse. En otras palabras, ignorar la emisión de estas palabras. Quizás simplemente con el hecho de no otorgarle atención produzca la omisión de esos comportamientos.
Si el problema persiste, debemos explicarle que esas conductas pueden ofender a la gente y hacerles sentir molestos o incómodos. Explicarles también cómo nos sentimos nosotros cuando nos habla de esa forma (ej. Tristes, preocupados, molestos, etc.).
Si esos comportamientos los emite para transmitir su irá o desacuerdo, podemos enseñarle conductas alternativas saludables.